Gran flota: la historia de éxito de la empresa lituana Vlantana
Economía & Logística
Para el lituano Vladas Stončius, la clave del éxito radica en los transportes respetuosos con el clima. El gerente de la empresa Vlantana apuesta por el transporte combinado y los nuevos camiones de Mercedes-Benz.
Vladas Stončius tiene la habilidad de saber identificar las buenas oportunidades de negocio. A finales de 1991, apenas un año después de que Lituania se independizara de la antigua Unión Soviética, este bombero profesional tomó una audaz decisión: Stončius renunció a su puesto de trabajo, solicitó un crédito y viajó a Alemania. Su plan: adquirir allí algunos camiones usados y fundar una empresa de transportes en su país. En la actualidad, la firma Vlantana cuenta con 1 200 camiones y 1 360 semirremolques – 600 de las tractoras de la flota son de la marca Mercedes-Benz, tendencia en aumento.
“A principios de los años noventa realizábamos transportes a Rusia con tan solo 15 camiones”, explica Stončius, “en la actualidad, Vlantana es la segunda empresa de logística más importante en la región del Báltico. Ofrecemos servicios de transporte a toda Europa y contamos con una plantilla de 1 800 empleados”.
Tras la disolución de la Unión Soviética, Lituania y el resto de los países de Europa Oriental atravesaron épocas económicamente difíciles. La adhesión de Lituania a la Unión Europea le dio al país un impulso que permitió una recuperación rápida y sostenible — Lituania, Polonia y Eslovaquia registran en la actualidad un crecimiento de aproximadamente un 3 % y se encuentran entre las economías mejor posicionadas dentro de la UE.
El auge económico experimentado por los países bálticos radica en bajos costes de personal y producción, una población joven y bien capacitada así como en una política económica de tendencia liberal. Esto hace que la región resulte sumamente atractiva para el emplazamiento de empresas de Europa Occidental y Escandinavia. El consiguiente aumento de encargos de transporte llevó a que en el transcurso de pocos años se establecieran en la zona comprendida entre el Báltico y los países de la antigua Yugoslavia numerosas empresas de logística con enormes flotas de vehículos. El éxito de Vlantana se basa en cuatro premisas básicas: sostenibilidad, seguridad, calidad e innovación.
Austera flota. Con los nuevos Actros, Vlantana redujo el consumo medio de la flota en aproximadamente tres litros de diésel cada 100 kilómetros.
“Tenemos la suerte de haber nacido como empresa en la Europa Oriental de principios de los años noventa: con la mochila vacía y sin el peso de las estructuras del pasado. Poco a poco fuimos llenando esa mochila con nuevas tecnologías y procesos innovadores”, explica Stončius. “Estructuras flexibles, nuevos procedimientos y complejas tecnologías de la información son claras ventajas competitivas, y no solamente en el área de la logística”.
La moderna sede de Vlantana — emblemático complejo de oficinas de fachada acristalada, con almacenes, gasolinera, escuela de conducción y taller propios —se encuentra en las afueras de la ciudad de Klaipeda, el puerto más importante del país. En el transcurso de sus 25 años de historia, la empresa se ha especializado en transportes intermodales desde el Báltico hacia Escandinavia y Europa. Entre sus clientes se encuentran prestigiosos grupos empresariales, por ejemplo un importante grupo estadounidense del sector de la alimentación y una gran cadena de muebles escandinava — ambos fabrican numerosos productos en Lituania y los hacen transportar por Vlantana hacia Europa Occidental.
“Tenemos la suerte de haber nacido como empresa en la Europa Oriental de principios de los años noventa: sin el peso de las estructuras del pasado.”
Vladas Stončius, gerente de Vlantana en Klaipeda
Para ahorrar a sus conductores y a la carga el largo camino a través de Polonia, Vladas Stončius utiliza el ferry desde Klaipeda hasta la ciudad de Kiel, en el norte de Alemania. Desde allí los remolques de Vlantana siguen en tren hasta la ciudad de Duisburgo desde donde continúan por carretera hacia toda Europa. “Realizamos rutas desde el Mar Caspio hasta el Cabo de Sao Vicente en Portugal”, explica el empresario. “Aproximadamente 200 de nuestros camiones transportan salmón fresco de Noruega a Grecia. Siempre que nos parece adecuado, utilizamos transportes combinados para garantizar la mayor eficiencia”.
Este empresario de 54 años oriundo de la ciudad balnearia de Palanga tuvo que afrontar recientemente un gran desafío. Debido al conflicto en el este de Ucrania y la crisis económica rusa, la cartera de pedidos de la empresa disminuyó drásticamente, razón por la cual decidió orientar las decisiones estratégicas de la empresa hacia Occidente.
Al igual que las firmas de la competencia, Vladas Stončius está constantemente en busca de talentos para su exitosa empresa: “La población de Lituana es joven y, gracias a las altas inversiones realizadas en escuelas y universidades, también muy capacitada. Aquí casi todos hablan perfectamente tres lenguas. Esto es una ventaja enorme para la firma. Sin embargo, encontrar conductores de camión, al igual que en el resto de Europa, no es sencillo. Cada vez es más caro encontrar personal capacitado, ya que los sueldos en Lituana son equiparables a los de la media europea”.
Óptima eficiencia.
Para poder mantener su competitividad, Vlantana optimiza la eficiencia de costes en otras áreas — por ejemplo en el consumo de combustible de la flota. La empresa compra para sus tractoras alrededor de 48 millones de litros de combustible al año. En el futuro, Vladas Stončius aspira a reducir claramente esta partida de costes, y para ello apuesta por la renovación de la flota con nuevos camiones de Mercedes-Benz.
“Al sustituir las versiones anteriores del Actros por el nuevo modelo, pudimos reducir el consumo medio de la flota de 32 a 29,1 litros cada 100 kilómetros”, dice el gerente. “En 2016 incorporamos 400 vehículos nuevos, y en los próximos años pensamos adquirir muchos más”.
Vlantana utiliza para sus rutas dos tipos de Actros: la variante 1845 para las rutas internacionales dentro de Europa y la versión 1851 para Escandinavia. Este último tiene, en comparación con el 1845, alrededor de 300 Nm más de par motor y es idóneo para los transportes más exigentes en el terreno montañoso de Finlandia, Noruega y Suecia. Ambas versiones están equipadas con el potente OM 471, cabina BigSpace, Predictive Powertrain Control, sistema de alerta por cansancio, detector de cambio de carril así como Active Brake Assist 3.
“Para nosotros, las necesidades de nuestros clientes son prioridad”, explica Vladas Stončius. “En este momento se le da mucha importancia a los transportes respetuosos con el medio ambiente. El que no estructura los procesos de su empresa de acuerdo a esta tendencia, pierde una oportunidad importante y en el futuro tendrá problemas con la adjudicación de contratos. Con los camiones eficientes de Mercedes-Benz estamos a la vanguardia para competir en el mercado del mañana”.
Fotografías: Alex Kraus
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