Conducción rentable: Victoriano Berrocal apuesta por el Actros

Panorama

«¡Abajo las emisiones!»

Victoriano Berrocal cuenta con 40 años de experiencia al volante, y reconoce que no deja de aprender. Gracias al Actros, su estilo de conducción es más económico.


Hoy también madrugó Victoriano. El fresco aire salmantino le dio los buenos días a las 5:30 de la mañana. El suyo es el primer camión que espera a descargar frente a los almacenes de una multinacional del bricolaje. Lleva mercancía paletizada. Un operario de la empresa cliente se encarga de desprecintar el camión y descargar los palés.

Cuando el remolque está vacío, Victoriano recoge de la mano del encargado la carta de porte firmada, sube a la cabina, arranca su Actros 1848 y se dirige a la autovía de entrada y salida de Salamanca, la A-50.

«La vista de la ciudad desde la cabina, con la catedral nueva y la catedral vieja al fondo, es sencillamente espectacular», asegura.



Este salmantino trabaja para Transportes Beconsa —firma especializada en el transporte nacional e internacional— cuenta ya con 40 años de experiencia al volante y no tiene reparos en reconocer que, hace poco, gracias a Eco-Support mejoró su estilo de conducción.

«El sistema es lo más parecido a un formador de conducción persona», explica. Eco-Support recoge y memoriza informaciones a través del cuadro de instrumentos como por ejemplo la velocidad, el uso del freno, los cambios y la actividad del acelerador.

«En primer lugar me centré en reducir el uso del freno», dice, «me llevó aproximadamente un par de semanas utilizarlo de forma óptima». A continuación, Victoriano ajustó cada vez más en sus rutas la velocidad adecuada: «Ahora puedo decir que mi estilo de conducción es altamente ecológico y económico».



Mucho ha cambiado el sector en cuatro décadas, especialmente en lo que respecta a la tecnología aplicada a camiones. Para Victoriano, el Actros, el buque insignia de Mercedes‑Benz, es un claro ejemplo de estos avances. «Todo esfuerzo es poco cuando se trata de reducir las emisiones», concluye.



Fotos: Begoña Tremps

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