Los tatarabuelos del Actros

Vehículos históricos

Los camiones más importantes en la historia de Mercedes-Benz: del ‘Daimler-Motoren-Gesellschaft Cannstatt’ al nuevo Actros.

Desde el nacimiento del primer camión en 1896 hasta el reciente lanzamiento del nuevo Actros, numerosos vehículos han marcado la historia de Mercedes-Benz. Aquí tienes los hitos más importantes.

El nuevo Actros llega a las carreteras como el camión más avanzado del mundo y el primero que ofrece conducción semiautonóma. Pero mucho antes que él, otros camiones de Mercedes-Benz pusieron su granito de arena para que la marca de la estrella ocupara el papel de liderazgo que desempeña actualmente. Son los tatarabuelos del Actros, camiones que, cada uno a su modo, han hecho historia.

Un carruaje sin caballos.

Una historia que comienza en 1896 con el legendario ‘Daimler-Motoren-Gesellschaft Cannstatt’. Probablemente este nombre no te diga nada, pero se trata del primer camión. Creado por Gottlieb Daimler, el ‘tatatatatarabuelo’ de todos los camiones de la historia marca un hito: inicia el transporte motorizado de mercancías. Hasta entonces y durante unos cuantos años más -el camión tardará aún algún tiempo en imponerse- los carruajes eran tirados por caballos.



Y eso es lo que, a grandes rasgos, es la genialidad de Daimler: un coche de caballos transformado con una carga útil de 1.500 kilogramos y propulsado por un motor Phoenix de dos cilindros, 1,06 litros y apenas 4 CV instalado en posición vertical debajo de la parte trasera del vehículo.

Llega el motor delantero.

Solo dos años más tarde, Daimler presenta un camión de 5 toneladas que ya tiene el motor y el radiador en la parte delantera, la posición más frecuente todavía en la actualidad.

Ya en 1908 llega el segundo antepasado más longevo del Actros. Fabricado en la planta de Gaggenau, que entre 1905 y 1911 opera bajo el nombre de ‘Süddeutsche Automobilfabrik GmbH’, el camión S.A.G. ‘Gaggenau’ C/36 estrena numerosos avances técnicos: bastidor de acero modular, ruedas de acero fundido y un sistema de transmisión de piñones en lugar de correa. Todas estas innovaciones hacen que la confianza de los ciudadanos por los camiones crezca y las ventas se incrementen de forma constante.



Los avances tecnológicos continúan llegando a los camiones de años posteriores, incluidos los que se ven inmersos en la Primera Guerra Mundial. Es el caso del Daimler de 4,5 toneladas y 45 CV denominado DM 4½b, construido en la planta de Berlín-Marienfelde en 1913.

Innovaciones como la transmisión por cardan, los primeros neumáticos y, sobre todo, el ‘motor de petróleo crudo’ (antiguo término para el motor diésel), cuyo desarrollo en las fábricas Benz alcanza su madurez en 1923/24, pronto convierten al camión en un medio de transporte rentable para las empresas.

Los camiones de la nueva Mercedes-Benz.

La fusión que da lugar a Daimler-Benz AG en 1926 llega acompañada de una gama completa de vehículos comerciales entre los que destaca el L2 con motor de carburación de 55 CV. Es uno de los primeros camiones con el nuevo nombre de Mercedes-Benz.



Tras el auge de los motores diésel, en 1936 llega otro de los camiones que marca la historia de la marca de la estrella. El imponente L 10000 de tres ejes, capaz de transportar una carga de hasta diez toneladas. Con su ‘morro’ largo y la característica inscripción "Diesel" en el radiador, se convierte en el modelo tope de gama hasta 1939.



Menos modelos, pero grandes números.

Con la Segunda Guerra Mundial y el Plan Schell, la gama de vehículos comerciales se reduce considerablemente. Junto con el L 1500 y el L 3000 llega el el robusto L 4500 (foto). Está propulsado por un motor diésel de 6 cilindros y 120 CV.



Llega el UNIMOG.

En los años 40, Albert Friedrich, que estuvo a cargo del desarrollo de motores de aviones en Daimler-Benz AG, tiene la idea de construir un vehículo de uso agrícola que permita aumentar la productividad. Finalmente, en otoño de 1946 comienzan las pruebas del prototipo del UNIMOG, que más tarde pasará a fabricarse en serie.



La división de vehículos comerciales de Daimler-Benz AG está en pleno apogeo en 1949, año en el que presenta el L 3250, su primer modelo tras la guerra. Con una carga útil de 3,5 toneladas y la cabina tras el motor, el L 3500 comienza la conquista del mercado alemán en 1950 y se convierte en una estrella de la exportación.



Desde el ágil L 319 hasta el peculiar LP 333 ‘Ciempiés’, los camiones redondeados y sin capó suponen un anticipo de las tendencias futuras en el diseño de camiones. Pronto llegarán las cabinas que aún perduran en la actualidad. Pero estos viejos camiones, que aún vemos circular en las películas, nos enamoran por su robustez, su elegante diseño y su espíritu pionero.      

¡Muchas gracias, antepasados! Sin vosotros, todo esto no hubiera sido posible.

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