El barro es divertidísimo... con Hydraulic Auxiliary Drive

Reportaje

El barro es divertidísimo... con Hydraulic Auxiliary Drive.

Micke Fahlström trabaja como conductor para la empresa Billman & Holm. Con su vehículo tractor Arocs de 510 CV y Hydraulic Auxiliary Drive, transporta pesadas máquinas forestales hasta áreas de bosque que requieren tala y las vuelve a traer, por supuesto, de vuelta. Y todo ello por pistas forestales que, en ocasiones, ni siquiera se reconocen como tales.

Micke conduciendo su «Taxi» en el bosque.


«Llevo máquinas motrices al bosque y las traigo de vuelta», cuenta. «Avanzar por allí es muy complicado». Micke describe su trabajo como una especie de servicio de taxis abierto todo el año. «No sabes muy bien lo que te espera al día siguiente. Recibes una llamada y arrancas».


Micke tiene un semirremolque bastante corto en su vehículo y suele llevar máquinas motrices muy grandes por caminos realmente estrechos. Hoy tiene que transportar una raleadora. Como debe contar con poco espacio en el área de actuación, es importante que utilice un conjunto de carretera que allí le permita girar.

«A veces no queda otro remedio que salirse del camino o encontrar otra alternativa. No en todas partes tenemos sitio para girar, pero al final siempre lo conseguimos.»

Cuando visitamos a Micke, es la época de deshielo y todo está tan lleno de fango y barro que el lugar haría las delicias de los más pequeños del hogar (de sus padres quizás no tanto...). Con este clima, el camión tiene que demostrar de qué es capaz realmente. Se trata de un Arocs de 510 CV con Hydraulic Auxiliary Drive, una tracción delantera que se conecta en caso necesario y que, a pesar de ello, no requiere kilos valiosos de la carga máxima porque no precisa árbol articulado ni de transmisión.


«A veces no queda otro remedio que salirse del camino o encontrar otra alternativa. No en todas partes tenemos sitio para girar, pero al final siempre lo conseguimos.»

– Micke Fahlström



«Dispongo de un chasis completamente normal sin eje propulsor en tándem detrás. Pero también cuento con una tecla que solo tengo que pulsar para que el motor hidráulico engrane en el cubo de las ruedas delanteras. Aproximadamente a los 30 km/h, se desconecta automáticamente. Y, en cuanto bajo de los 15 km/h, vuelve a conectarse de nuevo. Me ayuda mucho a salir adelante, precisamente en días de mal tiempo como hoy. Entonces resulta muy útil. Sin tracción delantera, no podríamos hacer este trabajo.»


El Arocs con Hydraulic Auxiliary Drive garantiza una mayor maniobrabilidad en el bosque.


Foto: Annika af Klercker

7 comentarios