Viaje por la costa: Andreas Freiholz y su Actros 2530

Panorama

El camión Aniversario.

Durante estos meses, los conductores como Andreas Freiholz mantienen todo a flote. Cada año, el y sus compañeros hacen entregas de más de 320.000 hectolistros de bebidas.


Andreas Freiholz se quita los guantes de trabajo. Sube a la cabina y bebe un trago de su botella de agua. Ya ha terminado con el primer punto de descarga. Es pleno verano, hoy hace calor aquí, en la bahía de Eckernförde. «Beber, beber, beber», murmura Andreas para sí mientras vuelve a cerrar el tapón de la botella. Se abrocha el cinturón de seguridad y mira a la izquierda y a la derecha. Con el dedo índice derecho, presiona el botón de parada y arranque del motor. El viaje continúa.

Andreas conduce para la empresa Behn Getränke GmbH de Eckernförde. La empresa distribuye cerca de 320.000 hectolitros de refrigerios al año: agua mineral, limonadas, cerveza, vino y bebidas alcoholicas.


Andreas lleva ya 30 años trabajando para el mayorista de bebidas. Su jornada laboral comienza a las 7 de la mañana en las instalaciones de la empresa, en las afueras de Eckernförde, sin contar con el trayecto de unos 30 minutos desde su casa de Schleswig. Allí se preparan más de 20 camiones para sus viajes, para lo que cuentan con palets de mercancía. Las carretillas elevadoras vienen y van del almacén a las superficies de carga de los camiones.

125 años.

En el parasol del Actros, una insignia hace referencia a los 125 años de existencia de la empresa. Yo conduzco el «camión Aniversario», explica Andreas. «A eso se debe también el 125 de la matrícula». Hoy debe dirigirse a un establecimiento gastronómico y a un supermercado, entregar las bebidas y volver a transportar los envases vacíos al almacén de Eckernförde. Ya durante la carga, los conductores se aseguran de trabajar eficientemente. Los palets destinados a la primera dirección de entrega, se introducen en último lugar en la caja de carga. También debe haber espacio para un elevador. «Nos sirve para llevar las bebidas a los almacenes. Forma parte del servicio que ofrecemos», dice Andreas.



En el área de planificación junto al almacén, puede verse un mapa de las sedes empresariales de Eckernförde Flensburg. El área de entrega es la costa oriental de la región norteña de Schleswig-Holstein, hasta la frontera danesa y, al oeste, hasta unos doce kilómetros después de la A7. Ninguna dirección está a más de 60 kilómetros de una de las sedes de la empresa. La gastronomía de la región depende de que la logística funcione correctamente. Una caída en las ventas de bebdias provocaría grandes daños económicos. Muchos negocios, disponen de una temporada limitada para ganar dinero para todo el año. Andreas y sus compañeros deben ser siempre capaces de hacer entregas rápidas.

Veranos intensos.

No solo suministran a restaurantes, cafeterías y hoteles. Hospitales, residencias de ancianos, comedores y supermercado también obtienen sus bebidas a través de Behn. Conducen hasta 1.000 direcciones de entrega, y 800 de ellas son establecimientos gastronómicos. En los meses de verano, cuando la región turística del mar Báltico recibe gran cantidad de visitantes, los alojamientos vacacionales, los locales y los bares de los campings están supeditados a la eficiencia de la flota de Behn.



La empresa utiliza los camiones durante el mayor tiempo posible. Gracias a que el área de entrega está claramente definida, recorren unos 30.000 kilómetros al año. Andreas, que trabaja para Behn desde 1990, sonríe y dice: «No quiero despedirme del camión tan rápido». Además del Actros, la flota de Behn dispone siete Ategos en funcionamiento, y son muy valorados por los conductores del tráfico de reparto gracias a su entrada de baja altura. Para los viajes de Andreas, el Actros es perfecto. Le convence la fiabilidad general para el servicio diario en los 80.000 kilómetros que ha recorrido ya. Además: «A pesar de su longitud, es muy maniobrable gracias al tercer eje con portaeje giratorio». Andreas elogia también los confortables asientos y la comodidad con que se sube y baja del vehículo.

La siguiente entrega es en un hotel ubicado cerca de un lago, apartado de la costa. El acceso es estrecho, la entrada para proveedores se encuentra en la parte trasera del edificio. Andreas da marcha atrás con el Actros por el camino. La parte del trabajo que empieza ahora es la más agotadora físicamente. Con la ayuda de la carretilla elevadora, Andreas transporta varios palets con envases de vacíos desde el sótano del hotel hasta un patio junto al camión.

Pronto aparecen gotas de sudor en su frente. Apunta las cantidades y lleva las bebidas encargadas al hotel. Después, coloca los envases vacíos en la superficie de carga del Actros. Una charla rápida con el personal de cocina. Más papeleo. Y de nuevo a la carretera, ahora otra vez en dirección a la costa.



Fotos: Sebastian Vollmert

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