España: Vasily Danci, entusiasta pescador

Reportaje

La tecnología adecuada.

Vasily Danci apuesta en su nuevo Actros por la MirrorCam y por el Active Drive Assist. Y, en su tiempo libre, adiestra su habilidad como pescador.


¿Puede haber algo mejor que conducir un nuevo Actros equipado con la última tecnología? «Sí, irse a pescar al mar después de trabajar», replica riendo Vasily. Este conductor sabe exprimir al máximo sus días: «Me encanta mi trabajo, y además puedo combinarlo con mi gran afición, la pesca».


El conductor rumano tiene la suerte de sentarse al volante de un nuevo Actros 1945. Vasily lleva más de dos décadas viviendo en España, y desde hace 12 años trabaja para la empresa Furgotrayler, que le ha facilitado uno de los últimos 30 vehículos adquiridos.

«Al principio me costó un poco hacerme con la nueva tecnología», reconoce, «pero me acostumbré muy rápido». Gracias a la MirrorCam, Vasily conduce y maniobra con la máxima seguridad. «El sistema me permite evitar muchas de las pequeñas complicaciones que nos encontramos todos de vez en cuando en las rampas de carga», afirma.



Plenamente convencido del Active Drive Assist.

Vasily realiza transportes tanto nacionales como internacionales, y en su camión lleva principalmente envíos de paquetería urgentes. El Active Drive Assist le ayuda a mantener una distancia segura respecto al vehículo que circula por delante y a permanecer en el centro del carril. «Eso es genial, sobre todo en recorridos de larga distancia», comenta y añade que todos los colegas coinciden.



«Me encanta mi trabajo, y además puedo combinarlo con mi gran afición, la pesca».

– Vasily Danci


Precisamente gracias a algunos colegas Vasily descubrió el mundo de la pesca. «Una vez me propusieron que pasara con ellos un fin de semana», recuerda. «Antes de haberlo probado por mí mismo, me parecía algo más bien aburrido», reconoce. Pero apenas media hora después de haber lanzado el sedal por primera vez, sintió cómo este se tensaba y la caña se doblaba. El carrete hizo un ruido y el sedal empezó a recogerse a toda velocidad. «¡Un sargo se había tragado mi cebo!», recuerda Vasily con emoción. Justo en ese momento se convirtió para siempre en pescador aficionado.

«Fue la suerte del principiante», dice entre risas. Reconoce que muchas veces se pasa cuatro o cinco horas sentado junto a la caña sin pescar nada. «¡Pero así se olvida uno del teléfono, del estrés y de todas las preocupaciones!»



Lo mejor es estar junto al mar.

Si Vasily tiene que escoger entre la pesca de mar y de río, lo tiene muy claro: «Estar junto al mar y escuchar cómo rompen las olas en la orilla es una experiencia incomparable». Desde su ciudad, Tarragona, suele ir hasta el Mediterráneo con dos o tres amigos que también son pescadores aficionados. Una vez metidos en faena, no son gente de muchas palabras. «Muchas veces intercambiamos anzuelos o cebos. Cuando uno de nosotros pesca algo, nos alegramos todos. Pasamos mucho tiempo callados». Y si se va a pescar él solo, suele buscar un lugar tranquilo para montar su puesto: «A los peces no les gusta nada el ruido».


Fotos y vídeo: Begoña Tremps

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